Descubre como el entrenamiento con armas del Kali puede potenciar en gran medida tus habilidades en combate de mano vacía. No solo por los atributos físicos que desarrolla sino por la mecánica de movimientos y originales estrategias para la defensa propia

 

 

 

   “Las armas son extensiones del cuerpo que ayudan a un ejército a ganar una guerra. Son las herramientas con las que toma ventaja un guerrero; sus armas pueden volverlo superior y forman parte de su integridad marcial”

 

                                                                                                           Mauricio Sánchez

 

 

 

 

     Existen muchas Artes Marciales que ponen especial énfasis en el entrenamiento con armas, de hecho en la mayoría de sistemas se enseña el manejo de algún arma tradicional. Ejemplo de estos lo podemos encontrar en las artes chinas, japonesas, filipinas, coreanas, okinawenses, etc.

 

    Muchos de estos sistemas estructuran su entrenamiento en armas como base de sus técnicas a mano vacía, en cambio algunos otros como el Kendo únicamente centran su práctica tomando en cuenta el arma y no existen técnicas de mano vacía.

 

     De entre todas estas artes podemos destacar el papel de las Artes Marciales Filipinas (AMF en adelante) en las que el entrenamiento con armas tiene un peculiar enfoque. En otros sistemas tradicionales el uso de armas se enseña cuando el practicante ha alcanzado un alto grado de habilidad en las técnicas de mano vacía, ya que se considera que para poder manejar un arma, el practicante debe poseer un alto grado de dominio físico. En contraste con esto, el entrenamiento en AMF es a la inversa, es decir, primero se enseña el manejo de las armas y después el uso de mano vacía. ¿A qué se debe esto? Bien, este proceso permite a los estudiantes alcanzar un mejor y más rápido desarrollo de sus atributos físicos en la aplicación de las técnicas de combate sin armas. Pero pasemos a ver como funciona este proceso.

 

 

 

BENEFICIOS DEL ENTRENAMIENTO CON ARMAS

 

    Kali, Arnis, Eskrima...  muchos son los términos para referirse a las AMF. La respuesta a que en Kali el entrenamiento comience con la enseñanza de las armas, en parte se debe a que antiguamente las Filipinas se encontraban constantemente en guerras contra diversos invasores y por lo tanto urgía que los guerreros se entrenaran lo más pronto posible en el manejo de armas para defender su territorio. El combate siempre iniciaba con arma en mano pero si por algún motivo durante el combate el guerrero perdía su arma, debía continuar la batalla a mano vacía, por ello el desarrollo de las habilidades para patear, golpear, atrapar y luchar también eran de vital importancia. Con las experiencias adquiridas en innumerables enfrentamientos contra japoneses, ingleses y españoles entre otros, los filipinos perfeccionaban sus sistemas de combate e incluso hicieron muchas adaptaciones a los sistemas de combate europeos. Los guerreros que sobrevivieron a las batallas fueron quienes fundaron las bases de las AMF que conocemos. De esta manera, Kali se convirtió en un sistema altamente efectivo probado en la guerra.

 

     Se entiende que por la situación crítica de la defensa del país, el uso de las armas era primordial, pero pronto los filipinos se dieron cuenta que el entrenamiento con armas desde el principio aportaba un desarrollo superior a los atributos físicos y un gran mejoramiento en las habilidades en la aplicación de las técnicas a mano vacía. Esto se debía básicamente a dos motivos:

 

1.  En las Filipinas existe una gran variedad de armas clasificadas en diversas categorías para las áreas en que se desarrolla el combate, es a lo que se conoce como Sandata.  Todas las técnicas con armas del Kali pueden ser extrapoladas a la mano vacía. Esto es posible a que el patrón de movimientos que siguen las armas y su juego de pies guardan una estrecha relación con los movimientos y conceptos de las técnicas sin armas. De esta manera la ciencia de los ángulos y matrices de movimientos de las técnicas son los mismos y al estar entrenando las técnicas con armas se habilita a la vez las técnicas de combate a mano vacía.

    

2.  Para poder manejar un arma se necesita tres veces más coordinación y habilidad que a mano vacía, así que al trabajar con el arma forzamos al cuerpo a ejercitarse con una intensidad superior a la que empleamos cuando entrenamos sin ellas. Esta intensidad es en velocidad, potencia, alcance, fuerza... Después de un tiempo podrás notar que tus habilidades ha mejorado significativamente. Algo similar ocurre cuando trabajamos con peso extra al levantar pesas para mejorar nuestra fuerza y/o potencia.

 

     Veamos como el entrenamiento en Kali con armas desarrolla uno de los atributos más importantes, los reflejos, y específicamente cuando nos entrenamos en el uso del bastón (palo), el cuál ha sido cronometrado volando hasta en 160 Km/h. La experiencia de un combate a contacto real con un palo y equipo de protección durante un periodo largo de tiempo hace que tu sistema nervioso opere a un nivel altísimo. En otras palabras, tus reflejos aumentan asombrosamente. Esto se hace aparente cuando uno cambia al combate a mano vacía... El golpe más rápido se mueve a cámara lenta y puedes percibir mejor los movimientos de tu adversario.

 

     Es como cuando después de circular en un coche a velocidades de 250 km/h, las velocidades habituales como 80 km/h. parecen lentas; lo mismo pasa cuando se entrena con armas, un jab, parece lento cuando haz sentido un palo pasar cerca de tu cabeza a 160km/h. La idea de entrenar con palos y cuchillos te ayudará a desarrollar los desplazamientos, reflejos y timing más rápido que a mano vacía.

 

 

KALI, UN SISTEMA BASADO EN CONCEPTOS

    

    Otra de las grandes ventajas del entrenamiento en AMF es que estas se estructuran con base en conceptos, contrariamente a otros sistemas basados en técnicas. Es decir, existen estilos que predican determinadas técnicas aisladas para resolver determinadas situaciones (esto puede ser cierto hasta cierto punto). En cambio, en Kali tenemos conceptos que pueden aplicarse a diversas situaciones de combate sin tener que cambiar demasiado el movimiento. El aprendizaje de los conceptos que rigen la mecánica del movimiento te permitirá adaptar muchísimas maniobras técnicas para resolver diversas situaciones de combate bajo el mismo concepto e incorporarlas a patrones mentales, que de esa forma son más fáciles de recordar por nuestra memoria muscular. El resultado es que responderás más eficientemente a las acciones de tu adversario. Mientras menos opciones tengas por elegir, tus reacciones serán más rápidas; actuarás con economía de movimiento y podrás adaptarte mejor a una gran variedad se situaciones de defensa propia.

 

     En Kali las técnicas con armas se traspolan a mano vacía y para ello primero debe conocerse la mecánica del cuerpo. Sin importar el arma que se use, lo que hace que el arma sea funcional es el cuerpo, si el cuerpo no funciona de manera apropiada el arma no será útil, esto está en total contraposición a un “sistema basado en técnicas”. En las AMF se tienen el concepto de que las técnicas a mano vacía no van a ser funcionales si no se posee los atributos físicos que las soporten, por lo tanto el entrenamiento con armas se inicia primero, ya que este se utiliza como el medio para desarrollar los atributos físicos y patrones de movimiento. Con un palo o un cuchillo en tu mano serás más coordinado que a mano libre.

 

     No hay mucha diferencia entre escapar de una estocada de cuchillo y un jab, en cambio si existe una gran diferencia en los efectos que producen ambos ataques. Cuando nos enfrentamos a un oponente en un combate a mano limpia, los golpes que llegan a rozar nuestro cuerpo o que recibimos con poca fuerza no son importantes, pero no es así cuando el ataque  que recibimos es con un objeto que con solo hacer contacto produzca serias lesiones. Intentar bloquear un ataque de cuchillo es un grave error, la respuesta aquí no son tanto las técnicas, sino reflejos, velocidad, timing, precisión...  bajo estas circunstancias las técnicas no son tan importantes como los atributos y los conceptos. No estoy diciendo que la técnica no sea importante, claro que lo es, pero debe estar apoyada por las capacidades físicas para que sea funcional.

 

     Dentro de las AMF el arte del Panantukan es un sistema parecido al Boxeo occidental en el cual se incluye el uso de los codos y los antebrazos. El Panantukan esta inspirado en el uso del cuchillo. Los métodos de entrenamiento que se emplean a través del cuchillo para desarrollar las técnicas del Boxeo son excelentes. De esta manera el juego de piernas (movilidad), así como la habilidad para boxear, golpear con los codos y atrapar hacen del Panantukan un sistema de gran  efectividad; y si añadimos el arte del Pananjakman (pateo filipino), Sikaran y Dumog (grappling) los cuales se especializan en el pateo, golpes de rodillas, codos, atrapes y lucha, tendremos un verdadero sistema de combate altamente efectivo.

 

 

 

 

 

    Hay una incógnita que muchos practicantes se cuestionan y es el “no poder hacer que las técnicas con armas funcionen a mano vacía”. La respuesta a este cuestionamiento tiene dos vertientes. La primera es que los practicantes cuando entrenan técnicas de cuchillo para el desarrollo de habilidades de mano vacía, usan una categoría de movimientos, y cuando tienen encuentros de contacto de mano vacía usan otra categoría de movimientos distinta. El eslabón que falta en esta cadena es un entrenamiento donde se realicen las técnicas de cuchillo a contacto real durante un tiempo considerable. El someterte a esta práctica permite ajustar tu sistema nervioso al timing de las técnicas en combate.

 

     El segundo aspecto hace referencia a que si has usado un cuchillo (cuchillo de entrenamiento por supuesto) en combate, contra un adversario que no colabora empleando las técnicas entrenadas, después de esa experiencia tiene mucho más sentido usar esos movimientos a mano vacía con más naturalidad. El practicar las técnicas a contacto real con armas te permitirá hacer la transición a mano vacía de manera más natural y tus capacidades combativas mejorarán como no habrías imaginado.

 

     Conseguir verdadera eficiencia en combate por medio del entrenamiento con armas en las Artes Marciales filipinas se consigue a través de un entrenamiento especializado, que no todo mundo sabe cómo desarrollarlo para que funcione en condiciones reales. En SIC contamos con numerosos e innovadores métodos de entrenamiento para desarrollar tus habilidades en combate. Te proporcionamos los escenarios apropiados para mejorar tu seguridad personal, así como disciplina mental.

 

 

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  Un sistema que te proporcionará los elementos necesarios para desarrollar verdaderas habilidades en combate, incorporando una amplia gama de posibilidades para dar respuesta a situaciones de defensa propia. Deseamos que tu experiencia con nosotros sea una experiencia emocional que te convierta en un verdadero Guerrero. Que tengas el control de ti mismo y consigas lo que siempre has querido. Descubre como los principios y enseñanzas de las Artes Marciales pueden convertirse en un camino de vida para tu superación personal.

 

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 Guro Mauricio Sánchez